El Viejo San Juan enrolo lluvia, pasto, fango y cerveza quemándolos al ritmo del reggae

Por: Mariana Quiles

Fotos: Joelly Rodríguez

La noche del sábado 30 de julio el cantante jamaiquino, Damián Marley, visito la capital de nuestra bella Isla del Encanto, San Juan. La primera cita de esta estrella en el país tuvo lugar en el sector colonial de la zona Metropolitana, El Parque del Tercer Milenio en el Viejo San Juan. 

Y esta servidora, como al parecer es costumbre a la hora de cubrir eventos que auspicia Coors Light al aire libre, sufrió las consecuencias a la hora de encontrar estacionamiento y por supuesto los embates de la lluvia y el clima. Esto, añadido a que desde las 4 de la tarde estaba cubriendo otros eventos para ustedes, como lo fue la Final del Puerto Rico Salsa Congress, hizo que no tuviera el placer de ver mas que los últimos temas de la actuación de Misael González, miembro y vocalista de Yerba Bruja, que en esta ocasión presentaba su sencillo “Mil Colores” que forma parte del reciente álbum “Sembrando Semilla” en el que participaron 11 bandas del patio.

A esas horas de la noche ya habían caído varios aguaceros y el Parque del Tercer Milenio estaba bastante lleno, no a su capacidad, pero sorprendentemente lleno a pesar de las inclemencias del tiempo. Tras la actuación de Yerba Bruja se tomo la tarima un Dj, que se encargo de amenizar la espera pinchando temas de repertorios new roots y reggaemuffin de artistas del patio e internacionales como el mítico padre de Damian, Bob Marley. Mientras el invitado estrella esperaba a que dejara de llover para presentar su espectáculo sobre el escenario.

Como a eso de las 12:15pm salió a escena la banda que habitualmente acompañan a Jr. Gong, el menor de la dinastía Marley.  “Super Heavy” la banda compuesta por guitarra, bajo, batería, teclado/órgano y dos vocalistas femeninas, además de uno encargado de ondear la bandera Rastafari durante todo el concierto, tocaron unos compases de “Concrete Jungle” de Bob Marley como aperitivo dando paso a otro miembro de la agrupación, “Sky High” que funge como maestro de ceremonias y telonero. Después de avivar a la multitud este rastafari dejo paso al verdadero reclamo de la noche.

Con su puño izquierdo en el aire Damian Marley entro al escenario, gritando “Saludos en nombre del Jah, Rastafari! Selassie I, siempre fiel, siempre seguro. Yeah!” (las misma palabras que dijo su padre en Pittsburg en los 80), envolviendo en un segundo a la audiencia que lo vitoreaba sin parar. Con sus dreds que casi tocaban el suelo y su típica t-shirt y mahones de colores oscuros este delgado jamaiquino se convirtió en el foco de atención durante casi dos horas. Cantando sus temas mas reivindicativos calentó al publico desde el principio… como con su sencillo “Jam Rock”.

El repertorio de esta agrupación estuvo lleno de clásicos de su discografía como de covers y versiones de algunas canciones de su padre. “Beautiful”, “Strong Will”, “All Rigth”, “Road to Zion”, “Jamming”, “Could you be loved” fueron algunas de las canciones que coreaba la multitud totalmente entregada a las llamas y buena vibra del reggae y reggamuffin. Con la versión de “Redemption” de su padre fusionada con el “dance hall” y el “deejaying” se desato la locura en el público. Entre una nube de humo, cervezas, fango, sudor y lluvia sonaron temas que han sido referentes del reggae en la isla durante los últimos años y que nunca se cansaran de escuchar como es “Africa Unite” y “Get Up, Stand Up”. 

Es importante destacar que este rastafari heredero del imperio musical Marley, se dirigió varias veces al público exhortándolos a la paz y la espiritualidad con su particular acento jamaiquino. Otro tema que no podía faltar fue el de la Marihuana, quien se proclamo y se expreso a favor de su legalización en varios momentos del concierto y llamo a “generar conciencia y dejar las hipocresías, ya que cuando fumas liberas a tu verdadero ser”. También tuvo el detalle de hacer vigente el legado de su progenitor cuando constantemente le preguntaba a la “nueva generación” que lo fue a escuchar, “?cuantos aquí presentes aman a Bob Marley?” y en las pantallas aparecían imágenes de ese gran músico.

El artista conecto en todo momento con el público y la vibra y energía que se desataba en el parque no tiene explicación en palabras. Invitaba al público participar en los estribillos y los incitaba a moverse con cada uno de sus temas a medida que la temperatura iba subiendo y sus voluptuosas coristas hacían un espectáculo coreográfico sorprendente.  Entre el repertorio de canciones que nos brindo esta colosal banda los temas anti-violencia y critica al gobierno que permite pobreza y desigualdad no faltaron bajo sus nasales y pegadizas melodías. Canciones que se encuentran en sus tres álbumes “Mr. Marley”, “Halfway Tree” y “Welcome to Jamrock” dieron estructura a este concierto. Como no podía ser de otra forma , Damian y su banda Super Heavy, nos deleitaron con grandes hits bajo un espectáculo ritual, rítmico, político y religioso como debe ser el buen reggae. En fin el Parque del Tercer Milenio tuvo un muy buen concierto que mantuvo siempre al público expectante para ver que es lo que venia luego. Pero lo bueno no acabo con el último acorde de la última canción, no, no, no… Después de este concert y un tanto alucinando con lo que acababa de ver, escuchar y vivir tuve que salir hacia los trailers a ver si podía conseguir una cuña o un saludo de este gran artista. 

Esperando a ver si este aceptaba bajar del Olimpo y darme unos segundos para entrevistarlo, decidí comprarme una botella de agua a 2 dólares!!! Luego de esta estafa, me puse a dialogar junto con mi amiga con Sky High (el maestro de ceremonia) que resulto ser el road manager de Damian, enterándonos que ésta aunque es la primera presentación en la isla de Jr. Gong no será la ultima pues esperan que antes de fin de año regresen para presentar un nuevo sencillo que estará en el próximo álbum que planean sacar en el 2012. Por otro lado también se nos acerco el guitarrista Mike y nos adelanto que será “una mezcla de todo, ni rock, ni reggae, pura mezcla”. Aprovechando este acercamiento tan “sutil” quise saber su impresión acerca del reggaetón y para mi sorpresa dijo “respetamos ese género pues es el “baby” del reggae y el ritmo nos agrada...” (luego de una pausa suspirando, se pone serio y continua) “lo negativo es el mensaje, no entiendo bien el español, pero en el reggae también hay algunos que no brindan un mensaje positivo”. 

Un tanto nerviosa y sorprendida pues no podía creer que conocieran este género le solicite si podía conseguirme un pase o algo para entrar al vagón donde se encontraba Damian. Se rio y le hizo un gesto al guardia para que nos dejara pasar, acto seguido estábamos mi amiga con cámara en mano y yo dentro del “tráiler”. Pero ni la simpatía que caracteriza al dúo de Musicaliza, ni su propio guitarrista permitieron que pudiera entrevistarlo, quitándome la grabadora luego casi de suplicar.

Todo la energía rica y buena vibra que experimente en el concierto, se esfumaron en medio segundo ante esta situación, empezando a sentir un tipo de rabia y frustración a la vez que vergüenza pues el guille de periodista natural mistic aguerrida se transformo en el de una gruppie mas, que hace fila para que el “GRAN DAMIAN” se tomara una foto conmigo y ni siquiera se volteara a mirarme. Es por esto que después de la dichosa foto, agarre mis pilchas, a mi amiga y salimos volando de allí, sumamente frustradas y sorprendidas. Tanto así que ni nos despedimos de Sky High y Mike, montándonos en el carro y saliendo casi chillando gomas del parque.

Y eso fue todo en una noche de sábado en la que el fango, la lluvia, la cerveza, el humo y el buen reggae quemaron la capital boricua y se disfruto de la gran actuación de uno de los grandes del reggae y reggamuffin hoy día que siempre lleva a flor de piel y en su voz las creencias y principios rastafaris de UN AAMOR, UN PLANETA y LIBERTAD PARA TODOS. Y claro con una foto con Jr. Gong que atesorare en lo mas profundo de mis recuerdos… si claroooo!